sábado, octubre 29, 2005

Pequeños placeres de ayer y de hoy:

- el chocolate

- un domingo con amigos

- caminar sobre hojas secas

- helado deshaaaciéndooooseeee en tu bocaaaa ...(cualquier sabor menos vainilla)

- leer (sin ruidos, sin gente)

- ver pasar árboles desde el vagón de un tren. Destino: cualquier lugar

- un poco de silencio, por favor

- pasear sin rumbo fijo (a ser posible, en una ciudad desconocida)

- books (Belle & Sebastian)

- el viento



- un abrazo :)

sábado, octubre 22, 2005

¿? cosas del destino:



Otoño-verano, verano-otoño. Cualquiera diría que los antiguos dioses de la humanidad están jugando al despiste. En estos días de paraguas y camisetas de verano, de castañas (tempranas) y helados (tardíos), empiezo a notar que falta tiempo. Y es cuando pienso que me gustaría vivir eternamente en un día findlandés.
Pero el dios-sol acucia sequía y, aún a pesar de que, Pandora se ha llevado a los hombres que pululaban por la ciudad (signo inequívoco del fin del verano), las ranas sigue sin mal escupir agua. Y yo sigo sin tener tiempo que perder.
Mientras, una hermosa joven india lleva en su mano un rosario hecho con letras del alfabeto, y enseña a la humanidad, textos y ceremonias para atraer a Chac (dios maya de la lluvia) hasta sus pueblos.
Dos ojos amplios, una larga nariz en forma de trompeta, dos colmillos encorvados y una cabellera hecha de nudos. ¿Realmente era tan difícil de atraer su atención?
Una taza de café, y como todo buen mago diría, ale-hop, he aquí una larga semana de lluvia.

No olvidéis el paraguas en casa.

miércoles, octubre 19, 2005

sin

Era un pueblo sin mar. Un lugar escondido entre dos montañas de un país extranjero. Yo estuve allí una vez. Estuve con Juan. Entonces, el cielo sólo tenía estrellas. Las casas no sé de que color eran. Sólo recuerdo su textura rugosa.
No ví nada más. Mis recuerdos de aquel día no se forman con imágenes. Ni siquiera en blanco y negro. Pero los ojos los tenía abiertos. Era de noche. Y no sé si había bombillas en la calle principal. Creo que pasé por allí, una vez al menos, o eso dice Juan.

domingo, octubre 16, 2005

¨en las noches buenas todos los pies son un 42" (Ray Loriga)